Que conste en actas que hoy me decidí

Finalmente después de un año, después de habérmelo jurado hace un año, después de sentirme como una mierda mientras duró, hoy me golpeó de frente, no sólo me golpeó, me arrolló y me destrozó. Creí hace un año que lo haría, que cambiaría, pero sólo fueron mentiras, me mentí a mi misma de una manera tan brutal y persistente que no me percaté de ello, llegué a creerme mis mentiras, llegué a creer que la ilusión se haría realidad sólo con pensarla a pesar de que nunca hice nada para cambiar.
Hoy después de un año me doy cuenta que he seguido igual, me sumergí en un ciclo del que no quise ver el principio ni el fin. Hoy después de un año volvió a mi y me volvió a despedazar en mil. Esta vez es para siempre, esta vez es definitiva, esta vez ganó. Mi orgullo no puede más, mi corazón tampoco pero entre ellos ganó mi orgullo. Hace un año me rompí el corazón pensando en esto, hoy se me rompió el orgullo al ver que 365 días después no hice nada para repararme para cambiarme para recomenzar, para devolverme aquello que un día fue mio.
Hoy señoras y señores, lectoras y lectores comienza un nuevo día, son las 8:30 pero es un nuevo día para mi, hoy el reloj se detuvo y volvió a cero para que vuelva a empezar, hoy el camino se hace de nuevo largo para volver a tener una larga senda para recorrer, hoy comenzó el inicio del resto del año y esta vez no me voy a decepcionar, esta vez no, estos 365 días no serán en vano, hoy realmente me juré cambiar aquello que odio de mi.