Los seres humanos tenemos la terrible cualidad de sabernos atormentar a nosotros mismos. Claro está, que es únicamente cierto para aquellos que nos atrevemos a pensar...Así que viendo por la ventana me pongo a pensar. Pensar en vos. Pensar en vos ya no es opción. Si pudiera verte a los ojos y decirte que te quiero, verías cómo brotan las mentiras de mis ojos. Si pudiera verte a los ojos y decirte que te extraño, verías cómo no engaño a nadie.
Descubrí que pensar puede ser terrible. Pensar en tantas cosas pueden quitarme el sueño por las noches y hacerme creer que perdí la razón de mis sonrisas.
Pero, como ya otros lo dijeron, "todo se olvida al despertar, una vez más". Volver a empezar, con la frente en alto. Sobre todo, mandar a todos a la mierda. Me niego a vivir la vida que me diseñaron, quiero vivir la vida que planifiqué para mi. No voy a quedarme sentada esperando.
De nuevo perdí el punto...
El punto es que, envuelta de rojo, no sé si de ira o de pasión, te miro a los ojos y te digo que te odio, te detesto y espero jamás volverte a ver.
No haré más lo que querés, no haré más lo que hace a los demás felices, y mucho menos a vos. Te lo digo con la mirada fija clavada en tus ojos que expresan tanto temor, que ya no tengo miedo a estar sola, y aunque fuese así, prefiero aguantarme mi miedo al vació que pasar un segundo más de mi valiosa vida con vos.
No estás a mi altura, no podrás nunca estarlo. Lo único que rescato de vos soy yo. Además, sabés que me encantan los retos, y vos siempre estuvistes ahí para darme lo que quise. Hay mejores peces en el mar, y aunque suene pretenciosa, lo digo por vos y no por mi. Pero si tenés dos dedos de frente, ya habías visto eso venir.
1 comentarios:
Me encanta "Lo único que rescato de vos soy yo."
Éxito.
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