Viendo por la Ventana

Viendo por la ventana me puse a pensar. No sabía si todavía te quiero. No sabía si quería volverte a ver, sin embargo, no podía alejar mi mente de ti.
Pero no estoy aquí para hablar de nuestro amor. Estoy aquí para hablar de lo que viene.
No sé qué será lo que vendrá pero sea lo que sea no quiero que sea a tu lado. Somos muy distintos para continuar con esta farsa. Ya somos adultos afrotémoslo, de todas maneras los dos sabemos que el amor no nos bastará.
Pero tampoco vine a hablar del amor de hoy o mañana.
¿Qué te parece un poco de sinceridad?
Por primera vez en nuestras vidas...
Mírame a los ojos y dime que sí es verdad. Por favor, no puedo dejar de hablar de lo mismo. El amor, tus ojos, tus labios, tu cabello, en especial tus labios, tus besos.
Pero ya terminamos. Ayúdame a creérmelo. No es que quiera olvidarte, pero al parecer tu ya lo hicistes.
Pedóname, sí ya sé que a ti también te importa, que no me haz olvidado.
REALIDAD: Necesito un nuevo amor, lo anterior es mentira, no lo quiero, ni pienso en él, pero sonaba lindo para empezar, tenía una cierta carnada, me pareció . Pero realmente necesito un nuevo amor, alguien en quien pensar y me haga sonreír aunque no esté. Que me haga sonreír bajo la lluvia con su recuerdo. Alguien que me entienda y me quiera tal y como soy, como a Jones. Alguien por quien haya hecho algo que jamás hubiera hecho por nadie más...
Pero cómo hacértelo saber...?

1 comentarios:

Anónimo dijo...

Puede que después de lo sufrido, lo hablado, lo llorado en silencio, el corazón me ruegue que no sea partícipe del festín que has preparado. Un festín en el que has repartido trozos inmesurables de un corazón que no rogó,que no quizo pedir de nuevo una oportunidad por que simplemente así lo pediste, por que tu corazón estaba dispuesto a terminar con su acometido.
Pero a razón de mi egoismo y mi egocentrismo duplicado, debo aceptar que me impedí abandonar la oportunidad de poner, por fín, puntos a las íes. Es esta la razón por la cual (tambien desde mi trabajo) me encuentro frente al monitor para seguir tu concejo... vivir, decir, sentir, odiar y amar hoy.
debí decirlo mucho antes, es demaciado tarde para esto... pero debo hacerlo.
No, mejor no. ¿Para qué? si puedo descifrar por lo expresado la enorme indiferencia que después de lo vivido sufres.
El teléfono no es ni fue una gran idea... Aún así recordar es una grata experiencia.