Descubrí que jamás lo quise, descubrí que jamás podría llegar a quererlo, por mi forma de ser, por su forma de ser...
También me descubrí pensando en él... pero diferente... A él nunca lo amé, quizá ni siquiera lo quise, pero amé de él la admiración que sentía por mi. Amé la forma en que me miraba, como si yo fuera más de lo que él jamás hubiera imaginado poder alcanzar. Amé que a pesar de mi indiferencia me siguiera amando. Amé que con tan sólo oír mi voz se le iluminara el rostro. Amé que me amara.
Amé de él que con cada instante que pasábamos juntos yo me amaba más.
Pero eso, mis amigos, no es amor, es egocentrismo.
5 comentarios:
Ponete Verde... pero no de Envidia... más info en http://identidad-comymk.blogspot.com/
Me suena familiar, ¿por qué será?
(Y nooo, no es por eso... Al mundo entero le consta que a él yo sí lo AMÉ.)
Curioso que se aplique a dos personas tan distintas, no?
mmmm ke te diré yo creo ke hasta narcioso envidió esa oda...
oh y por cierto ya no me puede decir ke nunk entro a su blog jeje
mmm perdon ahi, es Narciso..., estoy un toke knsado...
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